Cuando se le preguntaba por como había llegado a su estado de consciencia, el Maestro siempre se mostraba reservado.
Los discípulos intentaban por todos los medios hacerle hablar. Todo lo que sabían al respecto era lo que en cierta ocasión dijo el Maestro a su hijo más joven, el cual quería saber cómo se había sentido su padre cuando obtuvo la iluminación.
La respuesta fue:
– Como un imbécil.
Cuando el muchacho quiso saber por que, el Maestro le respondió:
– Bueno, veras .. fue algo así como hacer grandes esfuerzos por penetrar en una casa escalando un muro y rompiendo una ventana y darse cuenta después de que estaba abierta la puerta.
Fuente: ¿Quién puede hacer que amanezca? de Anthony de Mello
me parecen perfectos los cuentos son constructivos
Gracias Carlos por tus palabras y por participar en el blog. Un saludo Joost
Cuántas veces nos ahogamos con problemas, o amargamos el día buscando respuestas escondidas, cuando tan solo basta abrir bien los ojos para ver que están ahí!!! Gracias por los cuentos, siempre dejan un mensaje positivo y constructivo =o)
Gracias por tus palabras y por participar Nancy : -)
Me encantan los cuentos para mí es la mejor manera de llegar al entendimiento, reflexión y consciencia. Muchas gracias.
Gracias Maite por tus palabras. Será un placer verte por aquí leyendo los cuentos :-)