Un Maestro Zen con una forma muy simple de vivir, habitaba en un pequeña cabaña al pie de una montaña. Una noche, mientras el maestro no estaba en casa, un ladrón entró a la cabaña y se dio cuenta que no había nada para robar.
El Maestro Zen volvió justo en este momento y encontró al ladrón.
Dijo al extraño:
– Has hecho un largo camino para visitarme
– … y no deberías regresar con las manos vacías.
– Por favor, toma mis ropas de regalo.
El ladrón estaba asombrado, pero tomó las ropas y escapó.
El Maestro se sentó desnudo, observando la luna.
– Pobre hombre, murmuró.
– Hubiera querido darle esta hermosa luna.
Fuente: tradicional Zen
Me encantó. Gracias!
Existe otra versión en la que el maestro dice:
– Esta noche ha entrado una ladrón a mi cabaña. Me desperté y me había dejado la luna en la ventana.
Todos los cuentos que leí me encantaron los pienso compartir con mis alumnos de nivel primaria estoy desepcionada pues cada día roban con mas frecuencia, pero creo que nadie les ha dicho que robar no es bueno.
Gracias Alejandra por tus palabras. Creo que todos sabemos que robar no es una actitud correcta y que haces daño a los demás así … Habrá que encontrar la manera de que los chavales conectan con sus propios valores y que eligen dar la prioridad a estos valores ante todo. Los cuentos pueden ser un buen inicio para empezar a trabajarlo … saludo!