La leyenda

Abel y Caín se encontraron después de la muerte de Abel. Caminaban por el desierto y se reconocieron desde lejos, porque los dos eran muy altos. Los hermanos se sentaron en la tierra, hicieron un fuego y comieron. Guardaban silencio, a la manera de la gente cansada...

Hombre sucio, hombre limpio

Un rey hizo llamar a un santo rabino que que dormía sólo dos horas y las otras veintidós las dedicaba a leer su biblia. – ¡Dime la verdad que has encontrado en esas páginas o te corto la cabeza! El anciano sonrió. – Antes de revelarte el secreto que...