Haiku mariposa

El alumno le lleva al maestro su poema, en el cual dice: una mariposa: le quito las alas ¡y se vuelve pimiento! La respuesta del maestro fue inmediata: – No, no; eso no es así, déjame corregir tu poema un pimiento: le pongo unas alas ¡y se vuelve mariposa!...